Oro, uranio, estaño, zinc...
El alto precio de los metales en las bolsas internacionales ha disparado el
interés de muchas empresas mineras de todo el mundo por lo que se esconde
debajo de las piedras. Minas que cerraron hace dos décadas por su baja rentabilidad
quieren volver a abrir.
Sólo en Extremadura se han
concedido cerca de 100 permisos para buscar oro y uranio, entre otros metales.
En la provincia de Salamanca son conocidas las extracciones de wolframio en Los Santos, la histórica de uranio en Saelices y la "noticiosa" del mismo mineral en Retortillo.
Si lamentable es el impacto paisajístico, medioambiental y el destino de los minerales... más sonrojante es que el juego especulativo y el beneficio sirva a empresas de otros países. Y todo a cambio de unos muy lejanos puestos de trabajo, no cualificados. En resumen: los salarios son las migajas que llenan las bocas de los acólitos.
El programa Repor, de La 2, nos ofrece un acercamiento rápido a la actualidad de estas minas
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