Según ha explicado el alcalde, Manuel Oliva, esta iniciativa se puso en marcha en 2010, y hasta ahora se han beneficiado ocho niños en 2011 y 2012 y siete en la anualidad en que se puso en marcha el plan. En total, cada niño recibirá 1.200 euros a lo largo de los cuatro años, y hasta ahora han repartido 2.400 euros.
Las autoridades locales se han comprometido a mantener el reparto de cheques por espacio de los primeros cuatro años de vida, y a cambio, exigen unos requisitos centrados sobre todo, en la permanencia de las familias en el pueblo. Es imprescindible que los padres de los pequeños se empadronen en el Consistorio antes del embarazo, de no ser así, no podrán acceder al cheque
Noticia en La Gaceta de Salamanca
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