Noticia : Béjar Biz |
En la
presentación del nº 17 de la Revista de Estudios Bejaranos editada por el CEB y
celebrada en Bizarte, el sacerdote de la diócesis de Plasencia, Juan Manuel
Ramos Berrocoso hizo público un descubrimiento realizado al examinar con
detalle uno de los libros del archivo cuya mayor parte desapareció en el
incendio de la iglesia ocurrido en 1936, al comienzo de la Guerra incivil
producida por el golpe militar de Franco.
El lomo de
encuadernación de uno de esos libros, que milagrosamente se salvó porque lo
tenía en su casa D Plácido, el antiguo párroco de El Salvador, es una partitura
musical, realizada antes de que existieran los actuales pentagramas.
El
fallecido José Luis Majada, al glosar el libro en cuestión, dijo que el Libro
de Yedras, que es el libro donde ha aparecido el manuscrito, está encuadernado
con un pergamino, "que aún conserva la curiosa escritura de su música,
sobre una sola línea. Texto del libro escrito en letras negras, capitales en
rojo"
Juan
Manuel Ramos Berrocoso ha investigado esos retazos de partitura y tras
consultarlo con expertos, llega a la conclusión de que ese pergamino, que se
utilizó en el SXV para encuadernar el Libro de Yedras, es del siglo XII o comienzos
del XIII, prácticamente coetáneo con la refundación de la ciudad tras su
conquista a los musulmanes.
Esta
escritura musical está realizada según Ramos Berrocoso en la "notación
aquitana, conocida por tal nombre en virtud de la zona principal de su difusión,
que constituye una de las primeras formas de grafías musicales y que se mantuvo
viva entre los siglos X y XIII"
El
hallazgo es interesante según Berrocoso, porque es muy raro que existan ese
tipo de partituras tan al sur.
En lo que
se refiere a Béjar, lo relevante es que alguien, seguramente un clérigo trajo
esos manuscritos para ser utilizados en los ritos litúrgicos allá por los años
1200. Posteriormente ese tipo de partituras fue superado por otras (el
tetragrama y posteriormente el pentagrama) y por lo tanto fue reutilizado para
encuadernar otros libros.
Ramos Berrocoso además de estudiar la partitura ha
sido capaz de reproducirla y además, ahora se puede escuchar en todo el mundo
por internet.
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