El pasado sábado volvió a la vida (de manera oficial, todo sea dicho) el Cañito del Regajo en Santibáñez de la Sierra. La Corporación Municipal inauguró este
restaurado pilar que antaño daba su agua junto a la iglesia de este municipio
serrano y que durante las modificaciones urbanas posteriores a la Guerra Civil
desapareció junto con otros tantos caños que regaban la sed de los
santibañejos.
En un emotivo acto, Francisco Aguadero como
alcalde del municipio, bebió de la “nueva” fuente dando por inaugurado el Caño
del Regajo que mana en este lugar por la boca de un león, también símbolo de
los pilares municipales.
“El agua es fuente
de vida”, comentan desde el Ayuntamiento, “el nuevo Cañito del Regajo viene a
poner de manifiesto que los recursos hídricos no deben ser fuente de conflicto,
sino un elemento catalizador para la cooperación, la concordia y el progreso de
un pueblo. Con esta inauguración hemos querido traer un nuevo soplo de vida al
pueblo, un agua natural y directa del manantial histórico del Regajo que mana a
través de la boca de un león, también histórico caño de antiguos pilares
municipales”
El acto se clausuró con un pequeño convite para todos
los asistentes.
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