Hace tiempo que el ciudadano de a pie, maleado y descontento, entendió que las Administraciones Públicas han dado consistencia de dogma de fe a la rentabilidad económica. Aquello de la “rentabilidad social” ha quedado en el baúl de los recuerdos, casi como una reclamación de trasnochados “rojos” que no entienden, o no quieren entender, que el mundo se rige hoy por la normativa marcada por el FMI y Moody´s.
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| Fotografías : José María Harguindey |
Es el caso de nuestra Comarca, solo apta para ser
recorrida en vehículo privado y, si el alma no se arredra, a pie de senderista.
El próximo 1 de enero de 2015 se cumplirán 30 años del cierre “por baja
rentabilidad” de la línea férrea “Vía de la Plata”, que en nuestro caso unía la
comarca bejarana con la capital y fue, durante muchas décadas, cordón umbilical
de nuestros vecinos (y las industrias comarcales) con el mundo.
Esta vía, abandonada en nuestra comarca hasta
extremos degradantes, fue inaugurada en 1896 y por tanto su sola presencia,
andrajosa casi toda hecha, es un auténtico milagro.
No pediremos desde aquí, pues entonces caeremos en
ese error de los “rojos trasnochados” la reapertura comercial de dicha línea. Aunque
debiéramos. Pero nosotros, ciudadanos de a pie maleados y descontentos, ya
entendimos que aquí solo vale la rentabilidad económica.
En todo caso, tenemos un tesoro careándose como una
espina dorsal que el monte carcome atravesando nuestras tierras. Un tesoro que
va desapareciendo poco a poco, a pesar del esfuerzo de algunas asociaciones por
buscar una salida digna a este pedazo de historia (léase adaptación como Vía
Verde).
Las administraciones ya se han puesto en marcha para
desmantelar lo poco que queda de la Vía Férrea de la Plata. A 25.000 euros el
kilómetro de raíl. Por supuesto, rentabilidad económica ante todo. Y entendemos,
o quisiéramos creer si no fuéramos incrédulos, que si ese dinero a subasta de
raíl fuera a ser reinvertido en la Comarca en proyectos de futuro, nadie tendría
nada de objetar al desmantelamiento de la misma.
Seguramente nunca sabremos donde irá a parar ese
dinero.
Sólo tendremos la certeza, y seremos abuelos cebolletas
cuando lo contemos, que “por allá por el Bardal pasaba la vía del tren” y los
nietos nos mirarán incrédulos, tomándonos por viejos que chochean y que viven
de un pasado que ni existe ni volverá.
Vía
Verde “Vía de la Plata” YA!
salamancaentresierras@gmail.com
Os pido que reconsideréis la propuesta.
ResponderEliminarEl cierre de muchas líneas en 1985 fue una tomadura de pelo a los ciudadanos, por favor, no consumemos aquella canallada, sino que exijamos a nuestros políticos que el tren vuelva a circular.
¿Sabéis cuánto ha costado la autovía? Pues bien, recuperar el tren cuesta mucho menos. Y no hablo de meter los trenes por traviesas en mal estado, sino de recuperar la vía para una explotación comercial en condiciones.
Tenemos que ser más reivindicativos y no dar todo por perdido a las primeras de cambio.
Esa línea en buen estado puede ser de gran utilidad. No aceptemos autobuses donde puede haber trenes, no dejemos que el capricho de un mal ministro nos condicione el futuro.