 |
| Fotografías : Sequeros de la Sierra |
Aunque sepultados mediáticamente por el foco de
La Alberca, los pueblos de la Sierra de Francia continúan celebrando sus fiestas
veraniegas y patronales, en el ruido y alborozo municipal aunque los leves ecos
más allá de sus fronteras.
Es el caso de Sequeros que el pasado domingo
cerraba sus fiestas de agosto con el tradicional concurso de disfraces y el
baile en el Bar Andrés. Tras él quedaban cinco días de fiesta en la que no
faltó ni la diversión ni la tradición más pura. Pues Sequeros, al igual que La
Alberca, también tiene su misa, su procesión, su ofertorio… y su loa, esta
última abrió la liturgia festiva el miércoles 13 de agosto tras la elección de
la Reina y las Damas que serán la imagen hermosa y visible de estas jornadas
sequereñas.
El día grande de estas fiestas de añejo sabor
serrano fue el 15 de agosto, festividad de la Asunción, cuando el centro del
pueblo se traslada a las afueras, hasta la Iglesia del Robledo desde donde se
saca en procesión a la Señora del lugar, la Virgen del Robledo, momento de gran
emoción por lo que tiene de raíz profunda en el alma serrana, la conexión con
los asuntos de Dios y del tiempo, todo a una. Los colores de los trajes
serranos hicieron las honras en el baile y ofertorio, donde no faltó por
supuesto el trenzado del ramo. Y el fervor, ese, a raudales copando cada rincón
de la plaza.
Juegos, gastronomía, verbenas nocturnas…
actividades que fueron llenando (y viceversa) el calendario festivo, con
especial mención, por la afición que los serranos demuestran al arte, al
festival taurino del sábado, en el que los novilleros Emilio Benito y Francisco
Colmenero rompieron los moldes de la vieja plaza de toros de Sequeros, con dos
orejas el primero, cuatro apéndices y un rabo el segundo, triunfadores ambos y
puerta grande para todos en una tarde memorable.
Unas fiestas para disfrutar
de lo grande y lo pequeño, del detalle y el bullicio, de las tradiciones más arraigadas
de la Sierra y de la diversión más contemporánea.
No hay comentarios:
Publicar un comentario