
Si
no somos capaces de responder a estas tres preguntas tan simples, si no somos
nosotros los principales defensores de lo nuestro, ¿cómo podemos exigir el
respeto y la categoría que se merecen?
Aún
se escucha a algún paisano que define nuestros vinos “de escasa calidad”… ¡Renovarse
o morir! ¿Acaso estos detractores de la cultura salmantina se han parado a
conocerlos? Y bien digo: CULTURA, ya que desde los siglos XV y XVI pueden encontrarse citas históricas
que permiten atestiguar que la zona era conocida por sus vinos con los nombres
de Sierra de Salamanca o Sierra de Francia (este es su verdadero nombre
tradicional, pero en la Denominación se optó por ‘Salamanca’ para evitar
confusiones).
Gracias
a la ilusión de unos pocos que han luchado por colocar nuestros vinos en la
categoría que se merecen, hoy son una clara demostración de empeño, de emoción
y por supuesto de CALIDAD. Nos concedieron en 2007 DO ARRIBES y en 2010 la DOP VINOS DE
CALIDAD SIERRA DE SALAMANCA
Me parece
realmente indignante hasta extremos casi dolorosos no creer en lo que está
claramente demostrado, ya tenemos las categorías de DO y DOP. ¿Qué más necesitamos
para creer?
Pongo
aquí mi granito de arena, después de visitar una de nuestras bodegas hace unos
días, y comprobar -una vez más- que como todo en la
vida es cuestión de fe, de creer y luchar por algo. En esta
ocasión nos centraremos en la DOP VINOS DE CALIDAD SIERRA DE SALAMANCA. Queda
abierta así la segunda parte para la próxima semana con nuestra DO ARRIBES (la
lucha continúa…).
Denominación de Origen Protegida “Sierra de
Salamanca”
La comarca de la Sierra de Francia se encuentra al sur de la provincia de Salamanca, lindando con la provincia de Cáceres. Constituye una de las zonas vitícolas de mayor tradición en la provincia salmantina, con viñedos de más de cien años de antigüedad, la mayoría dispuestos en bancales orientados al Sur sobre el río Alagón y sus afluentes.
La comarca de la Sierra de Francia se encuentra al sur de la provincia de Salamanca, lindando con la provincia de Cáceres. Constituye una de las zonas vitícolas de mayor tradición en la provincia salmantina, con viñedos de más de cien años de antigüedad, la mayoría dispuestos en bancales orientados al Sur sobre el río Alagón y sus afluentes.
Parte
de la zona de producción entra dentro del Parque Natural de Las Batuecas–Sierra
de Francia y toda forma parte de la Reserva de la Biosfera de la comarca Sierras de Béjar –
Francia.
El
clima es mediterráneo húmedo, con inviernos relativamente cortos, no muy fríos
y veranos largos, calurosos y secos. En otoño y primavera abundan las
precipitaciones, con valores superiores a los 1.000 mm anuales,
que compensan la baja capacidad de retención de agua de los suelos. Dentro del
microclima de la Sierra podemos encontrar variaciones muy importantes debido a
la gran diferencia de altura entre viñedos. Encontramos cepas desde los 400
m. hasta casi los 1.000 m .
La
variedad Rufete es autóctona y predominante en la zona.
Se caracteriza por estar altamente adaptada a la misma, con un racimo pequeño y
apretado con un grano de tamaño más bien grande y hollejo fino. Es una variedad
delicada, de compleja elaboración que aporta aromas delicados con recuerdos a
frutas rojas y especias, posee taninos dulces y delicados que aportan elegancia
y complejidad a los vinos.
Otras
variedades tintas de calidad son aragonés (tempranillo) y calabrés (garnacha
tinta). Enblanco, las
variedades son: palomino fino, moscatel grano menudo,
viura y verdejo serrano.
Crianza de los vinos:
• Crianza:
Vinos tintos con un período mínimo de envejecimiento de 24 meses, contados a
partir del 1 de noviembre del año de vendimia, de los que habrán permanecido al
menos 6 meses en barricas de roble de capacidad máxima de 330 litros .
• Reserva:
Vinos tintos con un período mínimo de envejecimiento de 36 meses, contados a
partir del 1 de noviembre del año de vendimia, de los que habrán permanecido al
menos 12 meses en barricas de roble de capacidad máxima de 330 litros y en botella
el resto de dicho período.
• Gran
reserva: Vinos tintos con un período mínimo de envejecimiento
de 60 meses, contados a partir del 1 de noviembre del año de vendimia, de los
que habrán permanecido al menos 24 meses en barricas de roble de capacidad
máxima de 330 litros
y en botella el resto de dicho período.
• Envejecido
en roble: Vinos tintos que hayan permanecido en barrica de
roble de capacidad máxima de 600
litros indicando, en meses o años, el tiempo de
permanencia en dicha barrica.
“La
legislación europea reconoce las siguientes figuras de protección: IGP
(indicación geográfica protegida) y DOP (Denominación de Origen Protegida). A
nivel nacional dentro de las DOP hay dos subniveles: Vino
de Calidad y Denominación de Origen. A nuestra zona se le ha
reconocido la figura de protección Vino de Calidad de Sierra de Salamanca,
siendo por lo tanto una Denominación de Origen Protegida. En 2015 cabrá la
posibilidad de solicitar el cambio a Denominación de Origen Sierra de
Salamanca”.
Cinco son las Bodegas acogidas a nuestra DOP:
·
Bodega Antonio
Aparicio – Sotoserrano
·
Bodega de
Valdeáguila – Garcibuey
·
Bodega coop.
S. Esteban – San Esteban de la Sierra
·
Viñas del
Cámbrico – Villanueva del Conde
Bodegas Rochal – Santibáñez de la Sierra
Desde Diario de Salamanca
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