Fuenterroble de
Salvatierra ha vivido tres días intensos de fiesta en honor al Cristo del
Socorro. Las fiestas de primavera en este pueblo de la comarca de Entresierras
han aprovechado la afluencia de visitantes y “exiliados” durante esta Semana
Santa para llenar las calles de alegría y color. Aunque oficialmente las
actividades se iniciaban el Sábado Santo, ya el viernes podía atisbarse el
colorido y la tradición por cada rincón. El mismo viernes, y por decimoquinto
año, se realizó el Via Crucis hasta el Pico de la Dueña, tradición particular
que se ha convertido en algo casi vecinal con la promesa realizada por Isaac
García Carrasco que desde 1999 asciende con la Cruz al hombro hasta el paso
peregrino de la Sierra Dueña. Esta peregrinación se realiza en coordinación con
el párroco de Fuenterroble y acompañada de todos los que quieran acompañarle.
Al anochecer, se realiza
el Via Crucis dentro del propio pueblo, con la procesión del Silencio, donde se
canta el Via Crucis para después sacar al Cristo a procesionar.
El sábado 19 de abril a
media mañana se iniciaron las peculiares liturgias de esta fiesta salmantina,
con la recogida de los huevos cocidos y ofrendas en las antiguas escuelas de la
localidad. Por la tarde los más pequeños pudieron disfrutar de los juegos
organizados por la Asociación Juvenil con caras pintadas, juegos de animación y
un taller de globoflexia. Por la noche fue la disco-móvil Sound 78 la encargada
de amenizar la madrugada.
El Domingo de Resurrección
amaneció con misa y vino en honor en el Centro de Interpretación Vía de la Plata. Por la tarde se
llevaron a cabo varios campeonatos deportivos mientras que la verbena nocturna
fue a cargo del grupo Dolce Vita.
El Lunes de Pascua se llevó a cabo la tradición de
la subasta de los Huevos del Cristo, acto que ha dado fama a este pequeño
municipio. Los jóvenes, acompañados de los dulzaineros, llevaron los huevos
hasta la ermita del Cristo donde fueron bendecidos y subastados.
186 docenas, que al cambio son 2.232 huevos, fueron los que finalmente se
repartieron entre vecinos, amigos y curiosos visitantes.
El vino de honor fue en el centro de interpretacion via de la plata, no en el albergue y los huevos no se bendicen en la iglesia de santa Maria la blanca, si no en la ermita del santo cristo.
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