El Centro de Día y la Guardería Municipal, quebraderos de cabeza para el Ayuntamiento de Guijuelo

La nueva legislación en materia de competencias municipales y autonómicas ha supuesto un nuevo retraso en el proceso de adjudicación y apertura del centro de día de Guijuelo, que no podrá estar operativo al menos hasta el verano.

Es una apreciación del Consistorio después de que los servicios técnicos municipales se hayan visto obligados a elaborar un nuevo pliego de adjudicación del servicio, que estaba a punto de publicarse para abrir el concurso y adjudicar de forma definitiva la gestión de esta nueva instalación ubicada en las instalaciones de la antigua casa de la cultura de la villa. Según señaló el alcalde a La Gaceta de Salamanca, Julián Ramos, el contratiempo es consecuencia de la Ley de Bases de Régimen Local, que establece que este tipo de competencias han de pasar a la administración autonómica. Sin embargo, hay de plazo para resolverlo hasta finales del año 2015 por lo que el Ayuntamiento mantiene su intención de abrir dicha instalación para el servicio de los usuarios cuanto antes. Ramos manifestó la intención de que el pliego estuviera listo en un mes aproximadamente, de modo que, si no se producen nuevos retrasos, el concurso podría abrirse en el mes de mayo. El proceso podría ser rápido ya que, salvando los plazos legalmente establecidos, sí parece haber interés por gestionar este centro. Así lo confirmó el propio regidor al señalar: “Hay empresas que se han puesto en contacto con el Ayuntamiento para interesarse en qué estado se encontraba el proceso”.

Problemas en la guardería municipal

En otro orden de cosas, el Ayuntamiento de la villa chacinera podría tomar definitivamente las riendas de las obras de la guardería municipal tras los incumplimientos de la empresa adjudicataria. 

Según informa Radio Guijuelo, algunas de las mejoras previstas en el contrato de construcción del centro no se han llevado a cabo por lo que, una vez cumplidos los plazos legales previstos, el Ayuntamiento ha decidido reclamar  daños y perjuicios “por resolución del contrato de la obra”. La empresa se ve obligada de esta forma a dar explicaciones.
 

Entre las deficiencias detectadas destaca el soterramiento y la ampliación del centro de transformación eléctrica de la zona, aspecto incluido como mejora contractual que no ha llegado a ser asumido por la empresa adjudicataria.