Aunque ha sufrido menos la crisis que otros sectores,
el turismo rural también se ha visto afectado por la reducción del consumo y el
menor gasto de las familias en actividades de ocio. Sin embargo, los próximos
fines de semana que coinciden con la Nochebuena y la Nochevieja van a ayudar a
muchos pequeños empresarios a salvar los muebles antes de cerrar el año 2011,
no así en Reyes, fecha para la que prácticamente no hay reservas. Familias y
grupos de amigos que prefieren reunirse en una casa rural porque no tienen
espacio suficiente en sus viviendas o que buscan un punto intermedio entre sus
lugares habituales de residencia, o que, simplemente, buscan la forma más
cómoda de huir por unos días del mundanal ruido y acercarse a la naturaleza
ocupan ya el 80% de las casas de turismo rural de Castilla y León.
El presidente de la Federación de Asociaciones
Castellanas y Leonesas de Turismo Rural (Acaltur), Luis Rodríguez, asegura que
en estos momentos la ocupación de los alojamientos de la comunidad autónoma
alcanza el 80% de su capacidad. Ahora bien, son las casas de mayor capacidad
(diez o más personas) y las más próximas a los núcleos urbanos de población más
importantes las que han acaparado antes las reservas de los clientes. Incluso,
se ha notado un incremento en el número de reservas de familias respecto a las
mismas fechas del año pasado. Pero no durante todas las Navidades. Los fines de
semana más ocupados son los de Nochebuena y Nochevieja, mientras que en Reyes
todavía queda mucha oferta sin cubrir.
Castilla y León cuenta con una amplia oferta con
3.800 casas rurales y 33.687 plazas de alojamientos. Se calcula que los
alojamientos de turismo rural han perdido en 2011 el 2% de los clientes que se
habían contabilizado en 2010. Los pequeños empresarios del sector confían en
recuperar durante las Navidades algunos de los huéspedes que no se han
movilizado durante los últimos puentes, a consecuencia de la crisis.
A través de un pequeño recorrido por las nueve
provincias de Castilla y León se puede obtener un diagnóstico aproximado de la
realidad que registran los alojamientos rurales de la región.
En Salamanca
El
Refugio la Covatilla pone a disposición de los clientes 23 plazas, distribuidas
en tres casas de alquiler completo que se ubican en el mismo inmueble de La
Hoya, en Salamanca, y «está costando llenarlas», según se lamenta Pedro Crego,
que tiene todo alquilado desde 26 al 2 de enero. Desde su punto de vista, la
ausencia de nieve ha provocado esa bajada de reservas, aunque también se queja
de las casas ilegales que se han abierto por la zona y la competencia desleal
que, desde su punto de vista, ejerce un refugio abierto por la Diputación de
Salamanca.
Noticia en ElNorteDeCastilla
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