ENTRESIERRASrd | Sequeros acogió el homenaje a Santa Teresa de
Jesús con un acto cultural en el que la música y la poesía tomaron la palabra y
la emoción
Existen momentos
cargados de historia, que conectan con las raíces de un lugar de una manera que
conmueve el alma. Uno de estos momentos lo pudieron vivir, y sentir, los
cientos de participantes que dieron sentido al encuentro cultural en honor a
Santa Teresa de Jesús que tuvo lugar en el día de ayer en Sequeros.
La emblemática iglesia
del Robledo, cofre que guarda con celo buena parte de la historia de la Sierra
de Francia, vivió ayer uno de sus días grandes gracias a los actos en
conmemoración del quinto centenario del nacimiento de la santa abulense. El
coro Francisco Salinas fue el encargado de poner la primera voz a una jornada
llena de emociones con un recital que no dejó indiferente a nadie. El grupo
vocal salmantino, que puede presumir de una técnica que roza lo sublime,
deleitó a los presentes con diferentes temas de un amplio repertorio: Aleluya Carneiro, Pange lingua, Ave Maria,
Hymne de la Nuit, Stabat Mater… temas todos ellos precedidos por poemas y
extractos de diversos autores locales.
Momento cumbre, como
decimos, y conectado a la propia historia del lugar, supuso el broche de oro a
la actuación, cuando las voces, unidas las del coro con las del propio público,
entonaron el Himno a la Virgen del Robledo, que seguro se estremeció en su
peana.
Las actividades de esta
jornada de homenaje continuaron en la Llanada, el paseo que abre el camino del
caminante hacia el Robledo y que se jalona, con la legendaria Peña de Francia
como telón de fondo, con diversas cruces que fueron vestidas de encaje para la
ocasión. Un paseo poético musical con parada en cada una de las 'estaciones'
del Via Crucis donde varios niños y niñas leyeron algunos versos de Santa
Teresa, secundados por el violagambista Sergio Jiménez, imberbe pero avezado
músico que hizo las delicias de los presentes.
La fiesta cultural
finalizó en el escenario del teatro León Felipe donde se compuso una
emocionante ofrenda poética a la Santa, con pasajes del libro 'Sombra que desea
ser iluminada' de la poetisa Verónica Amat, con voz a cargo del grupo poético
'Musas' y el coro Francisco Salinas.
Una tarde de homenaje,
pero también de conexión con la propia esencia del ser humano, que busca,
aunque no lo quiera, la belleza en cuanto contempla, escucha y siente.
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