lunes, 23 de enero de 2017

El Valle de Almanzor

ENTRESIERRASrd | Una mirada al legendario y hermoso Valle de Hornacinos, frontera natural entre Salamanca y Extremadura
Debido al microclima benigno, la presencia humana en el valle de Hornacinos, entre El Cerro y Lagunilla, se remonta al menos a la época preromana, donde hubo asentamientos Vetones demostrados arqueológicamente con túmulos sepulcrales encontrados, de entre los siglos IV y III a.C. También se ha confirmado la existencia de un castro de triple trinchera en la cima de La Cabeza del Castillo, en El Cerro.

Y en la finca El Bardal se ha encontrado una lápida de 60x40x25 cm, con inscripciones en latín clásico: ACPVLSO IUS / ONTIVS / PRIMI. F. ENTUS / POS que pudiera traducirse como 'Reconocido a Júpiter, se la dedica Ento, hijo de Primo'. Podría tratarse del templo dedicado a Júpiter que se encontraba en la ciudad de Cáparra, según Hübner. Otras interpretaciones, según J.M. Blázquez, podrían ser inscripciones preromanas, ya que ACPULSOIUS fue una divinidad vettona de los DII Minores.
También se han encontrado restos de al menos dos núcleos romanos, en las fincas El Bardal y La Torrecilla. Fuentes con inscripciones latinas, vasijas, tejas y monedas romanas, demuestran la presencia romana. El Valle se encuentra en las proximidades de las termas romanas de Baños de Montemayor, entre las ciudades de Cáparra y Salamanca, por donde trascurre la Vía de la Plata por el valle contiguo al este.
Durante la época musulmana se ha documentado la presencia humana en el valle, incluso el paso de Almanzor por la zona arrasando el Valle en el año 977; frente a los generales cristianos: Bernardo del Carpio, Casarito Casal y Manuel Izquierdo. Esta batalla que duró tres días y tres noches, que llegó a teñir de rojo el arroyo Carpio por la sangre de los caídos, dio nombre de Valdelamatanza a esta zona del Valle. Finalmente la reconquista acaba el 14 de septiembre de 1022, con la gran batalla entre 30.000 cristianos frente a 48.000 moros que fueron derrotados. Los nuevos moros conversos subían el Valle de Hornacinos a la Ermita de Santa Ana, en Lagunilla.
Durante la Edad Media, se va repoblando la zona. Hasta llegar el año 1.273, en que el rey Alfonso X, el Sabio, crea el Concejo de las Mestas, dando derechos de paso a los rebaños pastoriles y creando La Real Cañada Soriana de Merinas, cuya variante y llamada Cordel de Merinas, atraviesa el Valle de Hornacinos de norte a sur.
También la zona sufrió saqueos durante la invasión napoleónica del siglo XIX.
Finalmente, la abundancia agraria, la espesura de los bosques y el clima benigno, dieron cobijo después de la guerra civil a gentes perseguidas, encontrándose aún hoy, un lugar llamado La caseta del Maqui.

2 comentarios:

  1. Según comentaban nuestros antepasados en esas tierras de hornacinos estaba enterrada la corona de la reina mora

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  2. Según comentaban nuestros antepasados en esas tierras de hornacinos estaba enterrada la corona de la reina mora

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