Fotografías : Mariana Lorca |
El pasado sábado 7 de diciembre
Colmenar de Montemayor pudo rendir un caluroso homenaje a uno de los hijos
pródigos de esta localidad salmantina, el torero Agapito Sánchez Bejarano.
Promovida por el presidente de la
Asociación Local y el Alcalde del municipio y Presidente de la Asociación de Mayores el diestro ya retirado acudió gustoso
a la invitación para explicar en vivo y en directo las vivencias de toda una vida
dedicada al toreo ante sus vecinos, su más fiel público.
Agapito nació en Colmenar de
Montemayor en 1944 y tomó la alternativa en Madrid en 1967. Su madre era
colmenareja también, por tanto de profundas raíces salmantinas; siendo niño se
trasladó con sus padres a trabajar en una finca de Plasencia, en Cáceres. Con la
bonanza del sector de la construcción un familiar se lo llevó hasta Barcelona
donde empezó a trabajar como cristalero, oficio que no le gustaba, acostumbrado
como estaba a vivir en libertad y “entre ganado”.
Empezó a torear en tentaderos, para
finalmente alcanzar el “estrellato” y formar parte de una época gloriosa de
grandes toreros, como El Cordobés y Palomo Linares, entre otros. El Bejarano
abrió las puertas de míticos cosos taurinos, como el de Las Ventas en Madrid o
la Monumental de Barcelona.
Una cornada, sin riesgo de ser
fatal, lo retiró de las plazas debido al principio de diabetes que sufría por
el riesgo que supondría sufrir una hemorragia.
Agapito Sánchez Bejarano reside actualmente en
Colmenar de Montemayor.
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