"Cruz Roja Salamanca sigue anclada en el provincianismo caciquil de hace años"

ENTRESIERRASrd | Entrevista exclusiva a Carles Villalba, vecino de Monsagro, que abandonó la 'gran ciudad' para emprender nuevos proyectos y una vida nueva en el corazón de la Sierra

Hoy entrevistamos a un 'not famous' de nuestra región, él es muchas cosas, entre ellas quiromasajista, entrenador y juez de gimnasia artística rítmica masculina, monitor de karate, patrón de embarcación,  ha practicado muchos deportes entre ellos: piragüismo, equitación, natación, tenis, le encanta la montaña, los huertos, la lectura, ahora está en la aventura de escribir un libro y además es  psicólogo clínico. Una 'eminencia' multidisciplinar que además hace unos años que decidió cambiar su Cataluña natal por un pequeño pueblo de la Sierra. Enclavado en el valle del Agadón, Carles se ha adaptado a la vida tranquila de Monsagro, desde donde intenta dinamizar actividades que supongan una implicación plena en la puesta en valor de este territorio inhóspito a la vez que hermoso.

¿Qué hace un catalán como tú por estas tierras castellanas?

Un catalán como yo, hace lo mismo que puede hacer cualquier otra persona de cualquier otra región de España. Vivir.

 ¿Qué tal es la vida en un pueblo como Monsagro?

Se vive muy bien, con tranquilidad pero a la vez con ganas de hacer muchas cosas. En estos momentos estoy en un año sabático indefinido, hasta que me salga algo interesante o me llegue el  tiempo de jubilarme, pues este mes de febrero cumplí los treinta años

¿Treinta?

Sí, treinta. Por segunda vez. Por segunda vez que cumplo treinta (ríe)

¿Y a qué dedicas tu tiempo?

Pues como vivo en este pueblecito enclavado en un Parque Natural y Reserva de la Biosfera, cultivo alguna cosa, para auto-obligarme a tener una pequeña disciplina y levantarme pronto, a la vez que he de caminar y trabajar físicamente al aire libre. Es un trabajo-placer.

¿Y en cuanto a ocio? ¿Hay oportunidades en la zona para poder llevar a cabo proyectos interesantes?

Bueno he intentado colaborar con una ONG.

¿Intentado?

Sí. Con Cruz Roja, pero……… no.

¿Pero no, por qué?

Pues porque en Cruz Roja de Ciudad Rodrigo y/o Salamanca no están acostumbrados a que les digas que algo no está bien. En cuanto usas tu derecho y obligación como voluntario apuntando fallos a mejorar, empiezan a mirarte mal y si sigues con más al final te arrinconan.

Pero eso te ha pasado en un departamento y con personas concretas o ha sido una situación generalizada

No me ha pasado en un solo departamento. Verás. En Cruz Roja te piden que por lo menos que estés seis meses en el departamento en el que te inscribes y yo he pasado por tres: Empleo, Asistencia Social y Comunicación (en este como referente)  y en todos he aguantado los seis meses de rigor. En todos he visto cosas a corregir y en todos he acabado dándome de baja por imposible. Ahora estoy en el ERIE…… de Castilla y León.

¿ERIE, eso qué es, lo puedes aclarar?

Sí, claro. El ERIE es el Equipo de Respuesta Inmeditata ante Emergencias y ahí también he opinado sobre defectos teóricos, pues no me han elegido aún para ninguna salida de emergencia en los dos años que llevo, pero en marzo de este año no opiné sino que me quejé por escrito abierta y directamente contra una técnico y monitora de un curso, es decir una empleada que cobra, por vejaciones….

¿Vejaciones?

Sí, por falta de respeto repetitivo a mí y a todas las personas durante un curso, algo inaudito en una ONG sí,  pero es algo que en este mundo entre seres humanos y dentro de una empresa puede pasar perfectamente, sea la empresa una ONG o una particular o una pública, se llama mobbing cuando es repetitivo,  y ahí es cuando topé con alguien que debe ser un hueso duro, alguien con algún contacto fuerte dentro de Cruz Roja y a raíz de mi queja escrita prefirieron creer lo que esa persona haya dicho (que no sé qué dijo, pero ella sí que sabe lo que dije yo) y me pidieron que me diera de baja, alegando que había pasado por varios departamentos  y en todos había tenido problemas. Esa es la vuelta a la tortilla, la manipulación maquiavélica, pura y dura que hacen de mis críticas siempre constructivas en vez de intentar arreglar y mejorar Cruz Roja. ¿Quizás amor propio porque alguien de fuera te destape las vergüenzas?….., no lo sé, pero de todas maneras una indiscutible falta de profesionalidad, con lo cual no se avanza, al contrario se retrotrae al pasado, bueno un pasado que en Cruz Roja Salamanca no ha pasado, siguen anclados en ese provincianismo caciquil de hace años. Aunque luego digan que no. A los hechos me remito.

¿Y tú situación ahora es….?

Bueno es peor; el pasado día 12 fui a Salamanca y aproveché para pasar por la Sede para ver cómo es que hacía dos meses que no recibía ningún correo del ERIE y resultó que figuraba de baja desde Octubre 2014, cuando en el 2015 he tenido actividad, algo reconocido por mi inmediato superior por escrito. Es decir que me han dado de baja sin comunicarme nada, pero manipulando la fecha y poniendo una anterior a mi queja sobre esa técnico, para así borrar rastros. Hecho que ya confirma todo lo dicho antes sobre Cruz Roja Salamanca por mí.

¿Y has llevado a cabo alguna queja sobre todo esto?

Ja,ja,ja.  Sí. Pero da lo mismo. He acudido incluso a la Presidencia de Cruz Roja en España, pero tras escuchar "promesas de cocodrilo", el resultado ha sido el silencio administrativo, es decir que han preferido creer a sus empleados a sueldo y tapar el asunto, que dar la razón a un simple voluntario en cuyo caso tendrían que aplicar algunos expedientes disciplinarios.

¿Y qué vas ha hacer?

Pues como está visto que intentar ayudar a la gente desde Cruz Roja Salamanca si eres inquieto, competitivo, creativo e inteligente no cuajas… Si no dices a todo que sí, que todo está muy bien, que son perfectos no te aceptan, así que, como te comentaba al principio pondré todo mi esfuerzo en cuidar mis huertos e intentar acabar mi primer libro.

¿Hablarás de Cruz Roja en él?

Bueno, es una novela histórica basada en principios del siglo XX, pero no te extrañe que haga alguna referencia, virtual, presunta claro.

Sabemos además, que en tu faceta de dinamizador social, has trasladado desde tu tierra natal alguna de las tradiciones gastronómicas de allí, como es la calçotada.

Sí, como el mar no lo podía traer, pues me pregunté qué podía traer para mí y para mis convecinos y el primer año planté los calçots. Como esta zona no tiene el mismo clima que en la zona del tarragonés, durante el invierno se paralizó el crecimiento y tardé 13 meses en poder cosechar y hacer una calçotada gratuita para todo el pueblo. Pero la gente que vino se lo pasó muy bien y sorprendidos de lo buena que puede ser una simple cebolla con, eso sí una imprescindible y sabrosísima salsa.

¿Animarías a otras personas a seguir tu ejemplo y "abandonar el mundanal ruido" para venirse a vivir a un municipio como Monsagro?

¡No! (ríe) que entonces si vienen todos aquí me tendré que ir yo allá para reencontrar la tranquilidad. Je,je. En serio: pues sí. Solo que para vivir “de aquí” eso ya es más peliagudo. Yo porque he tenido la suerte (que me la he buscado) de estar prejubilado, sino, es más difícil. Pero eso sí, la tranquilidad que se respira y la pureza del aire, del agua y de los alimentos que nos brinda la tierra no tienen parangón. Es calidad de vida.

Una última pregunta, ¿qué crees que hace falta para dinamizar y fomentar el desarrollo rural de zonas como la nuestra?

Dinamizar zonas como “la nuestra” implica única y necesariamente dinamizar todo el medio rural español.  Hacer de una vez la reforma agraria, que no se ha hecho. Aquí yo aún veo el caciquismo del pasado, los terratenientes de siempre, con sus subvenciones que no necesitan y que lógicamente restan de las personas que sí las necesitan. Apoyar al agricultor. Apoyar en toda la dimensión de la palabra apoyar:  estar a su lado, escucharle y al final ayudarle. Y al que engañe a la cárcel.

contacto para aludidos : salamancaentresierras@gmail.com

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