sábado, 17 de septiembre de 2016

"Sintámonos orgullosos de esta tierra que os vio nacer"

ENTRESIERRASrd | Hoy hacemos lectura del pregón ofrecido por Juan Manuel Ballesta, presidente de ACASIFE, con motivo de las fiestas patronales de Valdefuentes de Sangusín
Aunque ya el jueves echó a andar la programación festiva, ha sido en la noche de este viernes cuando los vecinos de Valdefuentes de Sangusín han inaugurado por todo lo alto las fiestas patronales que el municipio de Entresierras celebra en honor a su patrona, la Virgen del Carrascal. 

La presentación de las Peñas y la Coronación de los Reyes de las Fiestas han enmarcado este inicio de fin de semana dado a la fiesta, a la diversión y a la tradición, que tendrá su momento álgido en la mañana de este sábado con las honras a la Patrona.
Dentro de los actos inaugurales destacó el pregón ofrecido por Juan Manuel Ballesta, presidente de la Asociación de Amigos del Camino de los Arrieros, Sierra de Francia-Entresierras (ACASIFE), cuyo camino transita por Valdefuentes de Sangusín. Ballesta hizo un repaso por la historia de la localidad poniendo especial énfasis en la importancia del pueblo como punto de encuentro de viajeros y zona de paso durante siglos, una relevancia geográfica que ACASIFE está intentando devolver a la región. Transcribimos íntegro las palabras del pregonero.
Buenas noches vecinos y amigos de Valdefuentes /  Buenas noches Alcalde. Autoridades
En primer lugar, dar las gracias por invitarme a este acto, para pregonar las fiestas de este año, por lo que me siento muy honrado.
Hoy nos encontramos en este hermoso lugar, a los pies de la “Catedral del Sangusín”, como se conoce a la parroquial de la Asunción de Valdefuentes, para rendir justo homenaje a nuestra querida patrona, Nuestra Señora del Carrascal, motivo de estas fiestas, y casi justificación suficiente para que propios y extraños, nos juntemos de nuevo como cada año, para disfrutar por unos días de la tierra, la familia y los amigos.
Hace ya algo más de 10 años, que paso mis buenos ratos en la comarca, y concretamente en el vecino pueblo de Valverde. Sin embargo no fue hasta 2014 cuando realmente comencé a conocer los secretos que para mí atesora, los orígenes milenarios de los primeros asentamientos donde hoy se sitúa Valdefuentes, esperando a ser de nuevo redescubiertos, sacándolos del olvido y dándoles su merecido protagonismo.
Y decía que me sorprendieron los tesoros de Valdefuentes, porque en la investigación que llevé a cabo para documentar el proyecto y desarrollo del llamado “Camino de los Arrieros de la Sierra de Francia a Entresierras”, descubrí que los primeros y remotos vecinos de este lugar, databan de unos 2000 años antes de Jesucristo. Estamos hablando, pues, de cerca de unos 4000 años poco más o menos de antigüedad. Pueblos que dejaron su impronta en estos parajes, como por ejemplo la estela menhir bellamente decorada y bien definida,  de la edad del bronce, y descubierta en los años 70 del siglo pasado, en las inmediaciones del río Sangusín en el término de Valdefuentes. Por cierto, si queréis ver esa joya de vuestra historia, tenéis que ir a Salamanca, ¡al museo de la ciudad!
Y qué decir de “El Cabezo del Villar”, que todos conocéis, mudo testigo de un pasado cargado de historia y leyendas, pues fue primitivo asentamiento de romanos y visigodos, pueblos de los que, también, se han encontrado diversos restos arqueológicos. Lugar donde, según cuentan las crónicas, un pastor halló la primitiva imagen de nuestra patrona  en el hueco del tronco de un árbol, y se conoció a dicha imagen con el nombre de Nuestra Señora del Monte. La sacralidad del lugar, que viene de remoto, queda de manifiesto en varios de sus elementos: en su Morera (árbol considerado sagrado) que preside la explanada junto a la ermita, en el manantial de agua, agua que da la vida, y en el espléndido cerco de piedra, en donde hombre y animal, en otros tiempos, medían sus fuerzas. Todo ello llevó a la construcción de una primitiva ermita que se convirtió en lugar de culto y, posteriormente y sobre sus cimientos, el templo que hoy todos conocemos, renombrándose la imagen con el del paraje en el que se encontraba: “Nuestra Señora del Carrascal”.
Pero Valdefuentes de Sangusín se levantó en un nuevo lugar, el que hoy nos ocupa, allá por el siglo XIII, y desde ese momento se convirtió en encrucijada de Caminos.
En aquel estudio que realicé, descubrí que aquel camino que se conocía como “Camino de los Arrieros”, y cuyo nombre aún figura en diversos mapas de la zona, se asentaba sobre una calzada romana descubierta a mediados del siglo pasado por el agustino y arqueólogo César Morán. Esa calzada partía de Béjar hacia el oeste, en dirección a la Sierra Alta, y tenía como destino Ciudad Rodrigo.  Aún cuando, lamentablemente, no quedan restos para dar testimonio, esta calzada romana cruzaba de este a oeste vuestra población, Valdefuentes.    El Camino de los Arrieros, en estos lares, fue una ruta tradicional que se sirvió de la mencionada calzada romana para comunicar la Sierra de Francia, con el alfoz de Béjar y su villa. De hecho, esos arrieros, hombres y caballerías cargados de mercancías, llegaban por la puerta este de la Sierra (que podemos localizar en Santibáñez de la Sierra), para ascender por la cuesta del reventón (el nombre nos da idea de lo duro del ascenso) a fín de mercadear con sus productos en la Entresierra, así como en la propia villa de Béjar, que, recordemos, pertenecía entonces al reino de Castilla, a diferencia  de Valdefuentes, que pertenecía al reino de León. ES decir, esos “arrieros” pasaban de un reino a otro y lo hacían por estas tierras, por la frontera situada en el Valle del Sangusín, y más concretamente en la Calzada de la Plata. Con el paso de los años, y asentada la frontera tras la reconquista definitiva, todos estos territorios, quedarían integrados en el reino de Castilla.
No solo el espíritu comercial y vía de comunicaciones se respiraba en esta ruta, porque bien pudo ser utilizada por peregrinos, que venidos de la Peña de Francia, y caminando el llamado “Ramal Santero de la Vía de la Plata”, buscaban el Camino tradicional del Sur, para continuar su peregrinaje, por la Calzada de la Plata, hacia Santiago de Compostela.
Valdefuentes, es paso aún hoy también, de la Cañada Real Soriana Occidental, y la cruza  de norte a sur, que en otro tiempo, la hacía participe del comercio trashumante. Además de estas dos arterias importantes para la comunicación y la trashumancia, por  Valdefuentes discurría el llamado “Camino de los Vinateros” y muy cerca, aunque ya en el Valle del Sangusín , La “Calzada romana de la Plata” o como también se la conoció en época medieval “Calzada de Guinea”.
Arrieros, comerciantes, pastores y ganaderos, hicieron de Valdefuentes un lugar importante en la comarca  con sus “comercios”, un próspero lugar y en donde en la antigüedad, llegaría a haber dos mesones por el tránsito de arrieros y trashumantes en el “barrio de Abajo”, perdurando hasta nuestros días el nombre de “Sitio de los Mesones”.
Hoy celebramos la fiesta de la Patrona y con ella la fiesta de todos los Valdefuenteños. Sintámonos orgullosos de esta Tierra que os vio nacer, y disfrutemos juntos del placer del reencuentro, de la buena compañía y de la buena fiesta, y pongamos cada uno, en la parte que nos corresponda, todo nuestros esfuerzo y cariño, para que esta tierra no se olvide, y para que sigamos haciendo Comarca.
Por mi parte os aseguro que nuestra Asociación: “Amigos del Camino de los Arrieros en la Sierra de Francia y Entresierras” ( ACASIFE ), seguirá dando a conocer ”El Camino de los Arrieros”, porque no se trata solo de una ruta senderista. Es mucho más: Se trata de dar a conocer sus paisajes: bosques de robledales, fresnedas y carrascos; se trata de los pueblos que se encuentran a su paso y de su rico patrimonio arquitectónico y cultural; se trata de sus costumbres y tradiciones. De su folclore; se trata de su historia: arqueóloga y patrimonial ;  se trata en definitiva, de sus tesoros. Y lo más importante: se trata de sus gentes. Gentes pasadas: Rindiéndoles justo homenaje, a todos aquellos que trabajaron con gran esfuerzo, por ofrecer a sus familias una mejor calidad de vida, en la medida de sus posibilidades. Se trata de sus Gentes presentes, que perseveran en la memoria de aquellos que nos precedieron. En definitiva se trata, …… de todos vosotros, hijos de esta tierra.
Y como dijo el poeta: “Caminante no hay Camino, se hace Camino al andar……”
Desde nuestra humilde posición como Asociación, esperamos poder Caminar con todos vosotros.
   ¡Valdefuenteños!!!!!!
                                        ¡Viva la Virgen del Carrascal!!!!!   ¡Viva Valdefuentes!!!!
                                                                       ¡Felices Fiestas a Todos!!!!!
                                  

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