Carreteras de otros tiempos

ENTRESIERRASrd | La carretera de acceso a la pedanía de Alberguería del Campo requiere de una inmediata rehabilitación

La mejora de las infraestructuras viales del interior de la provincia es (o debiera ser) uno de los principales objetivos de las entidades públicos locales, provinciales y autonómicas. Los Planes de Carreteras continúan activos aunque, haciéndonos eco de las quejas de algunos municipios, no parece que "llueva a gusto de todos".

Recorriendo nuestra comarca podemos encontrarnos carreteras en perfecto estado, o al menos recientemente acondicionadas; otras que, con la moda del "más económico" parcheado comienzan a semejar dameros en blanco y negro; y un tercer tipo, que son aquellas vías de comunicación que se mantienen sin reforma alguna desde su creación, en algunos casos, más de 50 años.

Vecinos de la comarca de Entresierras han elevado su malestar por el estado en que se encuentra la carretera de acceso al pequeño pueblo de Alberguería del Campo (o Alberguería de Herguijuela), pedanía de Herguijuela del Campo localizada en las cercanías de Linares de Riofrío.

Los tres kilómetros de vía que atraviesan el término municipal de Alberguería desde la SA-212 a la CV-60 que atraviesa la subcomarca de Las Bardas hacia La Sierpe y Las Veguillas, son una auténtica pesadilla. Asfalto inexistente en algunos tramos, baches que son auténticos socavones en ciertos puntos, incluyendo la travesía de la propia pedanía, han hecho que usuarios de esta vía lancen su protesta por lo que consideran una "carretera tercermundista".

Cabe destacar que aunque, según los últimos datos oficiales, la aldea de Alberguería apenas cuenta con 11 vecinos, su acceso es bastante utilizado por alguno de los vecinos de la zona para "atajar" entre las poblaciones de San Domingo, Herguijuela o La Sierpe hacia la carretera de acceso a Guijuelo.

No obstante, un solo habitante (entendemos) de la más remota aldea, solo por la valentía de aferrarse de tal modo a la tierra, bien debiera suponer un esfuerzo extra a las autoridades que tienen en sus manos, y en sus presupuestos, el desarrollo integral de la comarca.