ENTRESIERRASrd | A pesar
de la amenaza de lluvia casi todos los pueblos de la región pudieron prender
sus hogueras para celebrar la llegada del verano
Dice el refrán que el 'agua de San Juan, quita
uva y no da pan', acierto de la sabiduría popular que siempre tiene
chascarrillos para todo tipo de situaciones.
Los cielos, según se ve, quieren San Juan y lo
quisieron y a su amparo, las hogueras fueron prendiendo una a una por cada uno
de los pueblos de la región.
En Los Santos los vecinos se trasladaron a las
Peñas de San Roque para rendir tributo al inicio del verano. En el municipio de
Entresierras son dos las personas que se encargar de preparar la hoguera e
invitar a aguardiente y perronillas y refrescos para los niños. Antiguamente
cada barrio preparaba su propia hoguera, cantando y bailando alrededor de la
lumbre.
En Santibáñez de Béjar las llamas prendieron
entrada la noche regadas también con sangría y dulces típicos de la localidad.
Algo similar que en Sorihuela, que hicieron acompañar el conjuro con
perronillas y aguardiente.
En Montemayor del Río, sobre el telón de fondo
del imponente castillo, la luminaria prendió trayendo de la mano viejas
tradiciones, como aquella de poner el cardo en la casa de la moza más 'fea'.
Cuatro ejemplos entre las llamas que secundaron
a San Juan en la noche de este martes y que cielo mediante, quizás ya sin pan y
sin uva, permitieron a la comarca honrar al solsticio de verano y su santoral.
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